Las garantías jurídicas inmobiliarias, o garantías inmobiliarias, son una alternativa en la renta de viviendas que ha cobrado relevancia en los últimos años. Esto por el potencial que tiene de simplificar los negocios. Si quieres tener negocios más seguros y constantes, esta información es para ti.
Recordemos que dentro de los negocios inmobiliarios, especialmente los que se centran en la renta de propiedades, existen una serie de limitantes que impiden que las relaciones entre inquilino, propietarios y asesores fluyan fácilmente.
Estas condiciones (como solicitar fiador, el pago de fianzas o solicitar grandes cantidades de requisitos a los posibles inquilinos) son frecuentes y regularmente utilizadas para proteger al dueño de la propiedad de daños o de que no reciba lo acordado.
Si bien estos requisitos surgieron para solventar esa necesidad de seguridad, actualmente se han convertido más bien en una limitante del sector, pues las condiciones de vida y las dinámicas poblaciones han cambiado. Por ello ahora usando la tecnología es posible saltarse esos requisitos sin sacrificar seguridad, esto haciendo uso de las garantías inmobiliarias.
¿Qué es una garantía jurídica inmobiliaria?
Una garantía inmobiliaria es un servicio por medio del cual un tercero autorizado asegura que un arrendador y un inquilino puedan establecer un contrato sin necesidad de contar con fiador.
Un ejemplo es Morada Uno, una fintech especializada en el servicio de garantía y protección de arrendamiento que busca “ayudar al inquilino a que pueda rentar una propiedad sin un fiador” esto sin poner en riesgo al propietario, explicó en entrevista Armando Huerta, Sales Manager Morada Uno.
De acuerdo con su información, Morada Uno es una herramienta con la que cuentan los asesores inmobiliarios para concretar operaciones. Los asesores al tener prospectos de propiedades y potenciales inquilinos debe asegurarse de encontrar el mejor acuerdo posible para todos.
Así, el asesor pone en la mesa la opción tanto para inquilinos como para propietarios, al aceptar el acuerdo, y firmar el contrato, el inquilino accede a que se realice una investigación sobre su buró de crédito, ingresos e incluso la existencia de procesos judiciales dentro y fuera del país.
Si el inquilino es aprobado, Morada Uno actúa como la figura que garantiza el pago de la renta de manera puntual. Sin embargo, el inquilino y el propietario determinan la forma y vía en la que se realizarán los pagos.
De acuerdo con Morada Uno, algunos planes tienen cobertura por los 12 meses del contrato y algunos casos cubren tres meses posteriores al fin del plazo. Además, se aseguran de que la propiedad sea entregada en buenas condiciones, es decir, que si se desarrolla algún conflicto, incluso judicial, Morada Uno representa al propietario y absorbe el costo del proceso como parte de la cobertura.
Este servicio tiene un costo de entre el 30% y 70% del costo de la renta y es un pago único, tienen presencia en la Ciudad de México, Monterrey, Guadalajara, Querétaro, entre otras. Y el servicio se puede adquirir en cualquier monto de renta. De acuerdo con su información, han participado en acuerdos de rentas desde 3,500 pesos hasta 100,000.
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¿Por qué buscar garantías inmobiliarias?
Armando Huerta considera que si bien los medios con los que los propietarios se protegían de incumplimientos, como el aval o fiador, fueron útiles en sus inicios, actualmente son una herramienta desactualizada.
Esto porque ahora existen distintas tecnologías que permiten tener mayor certeza sobre las personas a las que se puede rentar una propiedad. Además han quedado obsoletas por nuevas dinámicas, por ejemplo con la llegada de mayor número de extranjeros, la movilidad entre nacionales de un estado a otro, el potencial que ha abierto el trabajo remoto de mudarse de ciudad, las viviendas entre roomies, entre otras.
Todos estos factores hacen que el proceso actual y los requisitos solicitados limiten la actividad. De acuerdo con su información, de 10 operaciones de renta, aproximadamente 3 de ellas no se concretan porque el inquilino no cuenta con fiador. Esto afecta al inquilino al dificultársele encontrar vivienda, al propietario que mantiene su inmueble sin generar y al asesor que pierde la comisión de esa operación.
Los servicios de Morada Uno además hacen el proceso más rápido, así, después de que el inquilino accede a adquirir el servicio, la calificación se demora únicamente 48 horas.
“Nuestro objetivo es ofrecer un servicio más profesional, y sin fricciones, porque el inquilino solo necesita llenar un formulario, subir sus documentos que son INE y comprobante de ingresos y autorizar la consulta del buró. Es un proceso más seguro y ágil para propietario, el inquilino y el asesor inmobiliario” comentó Armando Huerta.
Actualmente, Círculo Bienes Raíces mantiene una colaboración con Morada Uno que permite a los asesores y propietarios hacer uso de este servicio en las operaciones. Así que no lo pienses más y pública tu propiedad con nosotros. Verás los resultados de inmediato.
